Teñir telas con té. Un delicado tono vintage

Me encanta ese delicado tono vintage 

o envejecido que tienen algunas telas . 

Y por si no lo sabías es muy fácil lograrlo...

Desde hace mucho tiempo, mi madre ya lo hacia,
me gusta teñir las telas, los hilos y encajes, 

sobre todo con té, dependiendo del que utilices, 

puedes obtener diferentes tonalidades.

Es estupendo para reciclar el té que ya has utilizado, 

como os dije, yo siempre lo guardo.

Obtendréis los mejores resultados
con tejidos naturales, algodón, lino, seda...
Los sintéticos absorben muy poco el color.

En principio veremos como hacerlo con té, 

pero también tiño con otros tintes naturales.

Hacemos la cantidad de té que necesitemos
para sumergir completamente las piezas a teñir.

Añadimos sal y vinagre 

que son los "mordientes" o sustancias 

que se utilizan para fijar y conservar el color.

Se tendrían que preparar las telas primero 

poniéndolas a cocer con el vinagre y la sal,

pero para ir más rápido lo añado directamente al tinte.
 Otros mordientes son el alumbre y el crémor tártaro, 

este último se utiliza sobre todo para dar brillo, 

se suelen poner juntos.

Tiño sobre todo cosas pequeñas, me es más fácil.

Lo dejamos hervir una media hora, lo colamos y colocamos dentro la tela,   

 lo dejamos de 15 a 30 minutos a fuego bajo, hay que ir comprobando el tono para no pasarnos.

También podemos dejarlo reposar de un día para otro en el tinte si queremos 

un tono más intenso. 

Lo aclaramos bien con agua, lo dejamos secar a la sombra  

y planchamos, el calor también fija el tinte. 

Si no te atreves con la tela directamente prueba con unos retales antes.

Con un té rojo, quedará un color más asalmonado.

con un té verde, queda un color más caramelo.

con un té negro, queda más marrón.

Se notará más la diferencia si el tono es más intenso 

sino quedan muy parecidos.

Me gusta teñir la tela junto con el hilo y la puntilla que voy a utilizar
así quedaran los tonos perfectamente combinados.

Además de teñir con té como os decía utilizo otros colorantes naturales

que dan muy buen resultado.
Con café quedan unos tonos muy similares a teñidos con té,
un poco más intensos, normalmente los suelo mezclar.

Con algunos materiales cuesta más obtener el tinte 

y los podemos dejar cocer una hora y otra hora con la tela.

Si teñimos con vino negro queda un tono alilado muy bonito. 

Se puede mezclar también con té, como en la foto de abajo.

Con la cascara de cebolla consigues colores diferentes según el tipo,

con la cebolla normal unos tonos naranjosos.

 Y con la cebolla morada, me sorprendido comprobar que obtienes

 un tono más verdoso muy bonito.

En la foto de abajo está mezclado con cúrcuma.

El azafrán da un tono ocre y la cúrcuma amarillo,

hay que tener cuidado con estos dos 
el color se hace intenso enseguida, hay que poner muy poca cantidad y 

vigilar el tiempo.

 

Me encanta como queda con los huesos de aguacate,

todo un hallazgo, los colores que se consiguen son rosas asalmonados.

                                                         Para conservar los huesos, los suelo congelar, 

 cuando tengo unos cuantos los pongo a cocer de 45 minutos a una hora, 
verás que se abren y van soltando el tinte,  

los dejo en el agua hasta el día siguiente, 

después saco los huesos lo cuelo y lo vuelvo a calentar 

 pongo la tela, la dejo unos 30 m aprox a fuego bajo. 

 La dejo hasta que va tomando el tono que me interesa. 

Con remolacha conseguimos un color granatoso o rosado 

dependiendo del tiempo que lo dejes, muy similar al hueso de aguacate,

en la foto de arriba, junto a las telas teñidas con aguacate 

puedes ver el teñido con remolacha, es el más oscuro.

En la foto de abajo las telas teñidas con col lombarda.

Es muy sorprendente, podemos obtener unos tonos que van 

desde el lila azulado a turquesas, mint, verdes y lavanda.

Para ello hay que añadir al tinte un ácido como es el vinagre o el limón 

para los tonos azules verdosos

o un alcalino, como es el bicarbonato para los tonos rojizos.

Las cascaras de nuez y bellotas dan unos tonos de beige a marrón.

No necesariamente se tiene que teñir desde un color blanco,
a mi me encanta teñir en otros colores
tanto hilos como telas y en estampados también, eso sí,
la base ha de tener en tonos claros.



Las utilizo en muchos de mis trabajos
 y la verdad es que los resultados son siempre muy delicados.

Espero que os haya gustado!!

Hasta el viernes.

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